¿Sostenibilidad o marketing? Lo verde, vende.

Hoy tratamos un tema que no va a dejar indiferente a nadie. La sostenibilidad en la sociedad y uso como reclamo de las empresas.

La sostenibilidad es clave para lograr los objetivos económicos, sociales y ambientales que proponen los ODS. A través de productos y servicios sostenibles reducimos la carga ambiental sobre el planeta, emisiones de GEI y vertidos de residuos.

Ser sostenible económica, social y ambientalmente hablando es vital para el futuro de la vida humana en

nuestro planeta. Y digo humana porque no somos imprescindibles para la vida biológica, si la humanidad se llegara a extinguir, el resto de vida seguiría su curso y se autorregularía como siempre lo ha hecho.

Ser sostenible implica una conducta que no todo el mundo está dispuesto a llevar a cabo, pues muchas

de las comodidades de que disfrutamos se verían restringidas.

¿Sostenible?, Solo un poco. La deriva de la sostenibilidad.

La cuestión de la sostenibilidad actual se centra en que muchas empresas afirman ser sostenibles en sus procesos de producción o en que sus productos son respetuosos con el medio ambiente. La realidad es que la sostenibilidad se ha convertido en una herramienta de marketing muy potente y de moda. Lo verde, vende.

Si un producto lleva una etiqueta en referencia a la sostenibilidad lo hace más apetecible que otro que pueda cumplir la misma función y desempeño, pero que le falte dicha referencia. Y, en verdad, posiblemente sí se hayan optimizado ciertos procesos o productos y no sean tan dañinos como pudieran serlo hace 10-20 años, pero no tampoco son la panacea.

El ejemplo de los plásticos.

Si atendemos a los plásticos, la guerra abierta en contra del plástico es abrumadora. El plástico es un mal a erradicar. Pero donde realmente radica el concepto de sostenibilidad es en la educación y en el quehacer de cotidiano de la ciudadanía.

Estamos centrando todos los esfuerzos, sobre todo los económicos, en la prohibición del uso del plástico cuando, bien utilizado y gestionado, el plástico es un material barato y reutilizable tantas veces como se necesite ya que el tiempo de vida es muy prolongado.

El problema de base es la educación. Ninguno estamos concienciados en que no solo debemos usar un producto una o dos veces y, tras ello, tirarlo y generar un residuo. Hablo sobre todo de bolsas y embalajes.

Recientemente estamos viendo como las regulaciones van en camino a la prohibición o encarecimiento, vía impuestos, del uso de plásticos para embalajes y envases, forzando a las empresas a encontrar alternativas que pudieran ser igual de dañinas para el medio ambiente pero que aún no está penalizado su uso.

Centrar los esfuerzos en la formación y educación ciudadana debería ser el primer paso para la reducción de la generación de residuos de plástico.

¿Podemos ser sostenibles realmente?

En mi opinión, no. El escenario 100% sostenible es una utopía. Todos los procesos de producción, tanto energéticos como de alimentos o de productos y servicios requieren de aportes externos de energía que, a día de hoy, resulta imposible satisfacer a través de energías renovables, si bien se trata de una de las metas propuestas y necesarias en la lucha contra el cambio climático, actualmente muchos procesos productivos requieren de bastas cantidades de energía cuya obtención requiere de combustibles no renovables.

Y no solo hablamos de procesos de producción. Volviendo al tema de la educación ambiental, las personas no estamos preparadas para llevar una vida sostenible. Dependemos de muchos factores externos que no hacen posible una vida 100% sostenible, por mucho que lo intentemos o pongamos de nuestra parte.

¿Qué ocurre con el reciclaje?

Por ejemplo a la hora de reciclar. Un acto como reciclar nos ayuda a ser más sostenibles pero para ello se necesita una cantidad de energía que no imaginamos. No con ello quiero decir que sea mejor usar y tirar, no van por ahí los tiros.

Pero sí hay que repensar qué uso le vamos a dar a nuestros productos antes de comprarlos y si realmente es necesario. Aquí entra en juego la reducción de residuos.

Reducir residuos no solo significa en disminuir la cantidad de residuos que generamos, también se centra en pensar en la necesidad de adquirir un producto y si puedo evitar consumirlo.

Si evito la compra de un producto que no necesito o puedo obtener una alternativa con productos que ya poseo o que pueden servir para varios cometidos (producto no específico), también estoy evitando la generación de un residuo innecesario. En este caso sí estamos consiguiendo ser sostenibles, ya que por un lado evito el consumo excesivo de productos y, a su vez, evito la generación de un residuo innecesario.

Y es que la sostenibilidad se basa más que en poder reciclar los usos y hacer una economía circular con los productos y servicios, en evitar la generación de residuos a través de la limitación del consumo de productos y servicios que puedan generarlos y que no sean estrictamente necesarios para nuestro día a día.

¿Y, entonces qué?

La sostenibilidad debe ser un acto altruista. Una manera de vivir y de pensar. Es algo que debe ser diario y debemos estar concienciados en que todo acto no sostenible tiene un efecto negativo tanto en nuestro modo de vida como en los ecosistemas del planeta.

Actualmente la sostenibilidad está vista como un activo industrial más. Un acto de marketing que las empresas implementan para regalar los sentidos a los consumidores y hacerles sentir menos culpables a la hora de consumir un producto o servicio. Como dijimos al comienzo del post, lo verde vende, y tenemos un gran problema porque no debería ser vendido sino enseñado, pensado y realizado de manera desinteresada.

Con el tema de la sostenibilidad podemos extendernos cuanto queramos, desde producción de alimentos, hasta energía, productos y materias primas. Nuestra misión, por el momento, es plantar la semilla de la duda y del pensamiento crítico y creo que con este post, al menos, hemos conseguido que vuelvas a pensar en cual de tus actos diarios son o no sostenibles y cuál de ellos pueden mejorar.

Como siempre, puedes participar en los comentarios y en nuestro perfil de Twitter @environmentator. Esperamos que os haya agradado la lectura!!

Pasar una feliz semana!!

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